Lo siento, ¡ese nombre de usuario ya existe! 2. Tratamientos de ortodoncia - Higienistas VITIS

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curso ortodoncia para higienistas

Curso sobre Ortodoncia e higiene bucal para Higienistas

Índice:
  1. Introducción
  2. Tratamientos de ortodoncia
  3. Higiene bucal y ortodoncia
  4. Higiene bucal durante el tratamiento de ortodoncia
  5. Prevención de problemas periodontales durante el tratamiento de ortodoncia
 

2. Tratamientos de ortodoncia

Los tratamientos de ortodoncia pueden ser interceptivos o correctivos y la edad de su inicio depende del tipo de problema y su gravedad (1):

Los tratamientos interceptivos pretenden evitar alteraciones mayores y se orientan a la corrección de toda alteración incipiente. Suelen empezar y acabar durante la dentición temporal o mixta y se emplean para corregir hábitos anormales, que pueden interferir en el patrón regular de crecimiento de la cara y maxilares.

Los tratamientos correctivos alcanzan resultados de­finitivos y se emplean cuando el tratamiento interceptivo no se ha realizado o no ha sido sufi­ciente. Generalmente se inician alrededor de los 10 o 12 años, duran entre año y medio y tres años, y suelen concluir cuando la dentición permanente se ha completado (a excepción de los terceros molares). Los tratamientos correctivos utilizan los siguientes tipos de aparatos:

  • Aparatos funcionales - Su indicación más precisa es durante la dentición temporal o la dentición mixta. Sólo realizan modi­ficaciones funcionales, pero dan lugar a cambios estructurales: al cambiar la dirección e intensidad de las fuerzas musculares también las transforman y producen desplazamientos dentales o maxilares correctivos. El empleo de esto aparatos requiere de una gran colaboración por parte del paciente, que debe llevarlos todo el tiempo que se le indique.
  • Aparatos removibles - Con ellos se pueden aplicar presiones controladas sobre los dientes que se desea desplazar, presiones que actúan independientemente de las creadas por la acción de los músculos que participan en las funciones de masticación, deglución, fonación y otras. Se sujetan con firmeza a los dientes, pero el paciente puede quitárselos para su limpieza.
  • Aparatos fijos - Son los únicos que pueden realizar todo tipo de movimientos (enderezamiento, torsión, rotaciones, etc.). Su colocación necesita bandas y brackets cementados sobre todos los dientes, así como arcos para lograr los desplazamientos deseados. Pueden desplazar de forma individual cada uno de los dientes en cualquier dirección, lo que no sucede con los demás aparatos. A menudo también se usan elásticos intermaxilares para ejercer la presión necesaria para mover dientes y maxilares hacia sus posiciones correctas; estos deben utilizarse durante el tiempo que se indique, ya que de no hacerse el tratamiento puede alargarse o no alcanzar el resultado óptimo. Los aparatos fijos están específicamente indicados en malposición dentaria, dientes rotados, cierre de espacios, corrección angular de la posición de incisivos y cuando es necesario controlar la posición de varios dientes o grupos de dientes a la vez (en uno o en ambos maxilares). Para la utilización de estos aparatos es imprescindible contar con la colaboración del paciente.
  • Aparatos extraorales - Crean fuerzas que dirigen el crecimiento de la cara y de los maxilares. También se emplean para mover los dientes o para impedir que se desplacen cuando no deben hacerlo. Su utilización ayuda a conseguir óptimos resultados.

El tratamiento finaliza cuando se quitan los aparatos fijos, pero aún queda otro paso: la retención. Los retenedores están diseñados para mantener los dientes en su posición correcta hasta que hueso y encías se adapten al cambio. El ortodoncista decidirá su tipo y el tiempo que deberán ser llevados.

 

Referencias

  1. SEDO-Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial. Lo que se debe saber sobre ortodoncia.